La felicidad comienza cuando lo que uno dice, piensa y hace están en armonía. Gandhi
En el décimo escalón de la misión del que comanda el Viento, el Monito juega, disfruta, salta, baila y ríe. Sabiamente expande su vida hacia el disfrute porque esta conectado con ese niño inocente y puro. Desde el cual todo es maravilloso, y perfecto tal como es. Si podemos conectarnos con nuestro niño interior entenderemos que viviendo la magia del momento presente y conectados con el disfrute de cada segundo, la vida no puede ser mas que maravillosa. Un divertido juego.
Permitámonos hoy, desdramatizar un poco la película que elegimos vivir, reírnos de aquellas cosas a las que les estábamos entregando nuestro poder, nada es tan grave como creíamos, y si estoy leyendo esto es porque estoy “vivo” y con todos mis sentido despiertos.
Hoy podemos hacernos cargo de nuestra vida y nuestra magia desde un lugar de gozo, con una enorme sonrisa en la cara, esa sonrisa que en onda expansiva se contagia.
Riamos desde el alma hasta el cielo, permitamos al mundo ver nuestra felicidad. No hay nada que embellezca más que una sonrisa pura.
La risa inmediatamente nos conectará con simple soluciones que la amargura no nos permitía ver.
El Tono planetario nos dice: Hoy venzo los obstáculos con alegría de vivir y expresando mi mensaje embellecido con los destellos del gozo de saber que todo es un juego. La tormenta nos guía a transitar los cambios con optimismo y confianza en el poder de estar conectado con mi esencia.
Energía Maya