Que todo fluya, que nada influya.
La luna mueve nuestras aguas internas para ser reconocidas y sanadas. Representa también nuestra familia y los aspectos maternales. Es importante entender que yo no soy mis emociones, pero que están para que pueda expresarme y crecer. Observa los mensajes que traen mis emociones a flor de piel. Y me permito fluir.
El tono planetario asociado a la luna roja nos direcciona a conectar nuestro flujo energético desde la esencia alineada a una intención que tendrá luego una manifestación. Recuerda que a donde va tu intención-emoción habrá manifestación.
La pregunta que nos deja este kin: ¿Cómo puedo perfeccionar lo que hago?
Soy líquida y fluyo de acuerdo con las fases de la Luna. Soy la reina del agua que nutre la vida. Soy la lluvia y la corriente que fluye alimentando a las plantas y las hierbas que florecen. En mi corriente sagrada yace la afinidad con todo. Estoy coronada por el esplendor restaurador de hojas, raíces, semillas y flores. La supremacía de la mente divina.
Conocerme a mí y a mis poderes infinitos de sanación Es dejar a un lado toda duda y entrar en la corriente de los fieles.
Energia Maya